sábado, 9 de abril de 2016

Herman Melville - Bartleby, el escribiente.

Bartleby, el escribiento es un cuento escrito por el norteamericano Herman Melville en el siglo XIX.
Fue publicado por primera vez de manera anónima y en dos partes. En los números de noviembre y diciembre de 1853 en la revista Putnan’s Maganize.
El relato tuvo escaso éxito entre críticos y lectores. Pese a esto, su importancia y reconocimiento no han parado desde entonces.
Cuenta la historia de Bartleby, contratado por un abogado quien tiene una oficina en Wall Street, para que copiara documentos. Junto a él trabajan Turkey y Nippers, dos ingleses que cambian de humor dependiendo del horario. Por la mañana Nippers y por las tardes Turkey.
También trabaja, con tan solo doce años, Ginger Nunt, este se encarga de hacer todos los mandados por un dólar a la semana.
Bartleby, quien se muestra como un empleado ejemplar solo se limita a hacer su trabajo de copista mas no a otra labor. Siempre que el abogado le pide que hago otra cosa este responde con una frase en particular: “Preferiría no hacerlo”.
El abogado de nombre desconocido y que a su vez es el narrador, opta por despedirlo. Pero a pesar de esto, Bartleby se niega a abandonar la oficina.
Incapaz de echarlo a la fuerza decide mudarse de oficina y dejar solo a Bartleby. Los nuevos inquilinos molestos con su presencia van a darle quejas a la nueva oficina del abogado.
Finalmente, Bartleby es encarcelado por vagabundo en un centro penitenciario de Manhattan. Y opta por morirse de hambre.

El relato tiene un final abierto dejando mucho a la imaginación.
“Creo que no hay necesidad de proseguir esta historia. La imaginación puede suplir fácilmente el pobre relato del entierro de Bartleby. Pero antes de despedirme del lector, quiero advertirle que si esta narración ha logrado interesarle lo bastante para despertar su curiosidad sobre quién era Bartleby, y qué vida llevaba antes de que el narrador trabara conocimiento con él, sólo puedo decirle que comparto esa curiosidad, pero que no puedo satisfacerla.”
¿Quién es Bartleby? ¿Quién es este hombre solo se limitaba a copiar documentos? Que no tomaba cerveza, ni té ni café, que nunca se le vio leer un periódico y que pasaba largos ratos mirando un muro frente a la ventana.
Hay muchas maneras de interpretar a este personaje sin biografía, desde un pobre vagabundo hasta una alusión al mismo Jesús Cristo.
En primera instancia, cuando el narrador encuentra a Bartleby en la oficina un domingo y posteriormente revisa su escritorio, me daba la impresión que se trataba de un vagabundo, o de una persona analfabeta que solo había aprendido la humilde labor de copiar textos tal cual, sin saber qué es lo que decía en ellos, motivo por el cual prefería nunca verificar los documentos junto al resto. Pero… Nunca hablaba de él, nunca socializaba, no salía del escritorio detrás de su biombo. No comía ni bebía nada.
¿Un robot? Una idea algo ilógica para un texto de la época, sobre todo porque no parecía un texto de ficción.
Llegué a la conclusión que el personaje tendría un trastorno psicológico caracterizado por en la intensa concentración de sí mismo, y la progresiva pérdida de contacto con la realidad exteriorO sea, autismo.
No tenía a donde ir, y el abogado de Wall Street, era incapaz de despedirlo, pero cuando por fin lo hizo, este no se movió de la oficina. Es ahí donde lo relacioné con el mismo Jesús Cristo. De pronto se me vino a la mente el relato bíblico: “El juicio de las naciones” – Mateo 25 y las obras de misericordia.
Son muchas las alusiones que le podemos dar Bartleby, nunca se supo nada de él, siempre prefirió no hacerlo, pero lo cierto es, y dicho por el propio autor:
“Bartleby había sido un empleado subalterno en la Oficina de Cartas Muertas de Washington, del que fue bruscamente despedido por un cambio en la administración.”
Lo cual no ayuda mucho a la comprensión del personaje. De alguna forma Herman Melville quiso que imagináramos la vida de este hombre. Tal vez ese haya sido uno de los propósitos de la lectura.
A mí me gustó esta breve tragedia, y no me hubiera interesado tanto de no haber sido por el final abierto que tiene.

Me gustaría saber que piensan ustedes sobre la biografía de Bartleby.

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