Tercera parte y supuestamente final de “El club de lo
incomprendidos”.
A diferencia de los otros dos libros, en este las cosas se
venían venir una vez leída la contratapa:
“[…] Pero después de la calma, la tormenta: malentendidos,
envidias, reencuentros inesperados,
historias que renacen, nuevos
personajes y la reaparición de
alguien muy especial para todos ellos volverá a poner su amistad en
peligro.”
Creo que todos entendimos que “reencuentros inesperados, historias que
renacen” era como “Vuelve el triángulo amoroso entre César, Valeria y
Raúl.”. Mientras que en “La reaparición de alguien muy
especial”, claramente hacía referencia a Elizabeth. Aun así sabiendo estas cosas del
libro, la lectura me resultó igual de sorprendente. Como si no hubiera sabido
nada, sobre todo el regreso de Elizabeth, el cual describiré más abajo.
Una vez más Conflictos de amor de entre amigos:
Este es un tema muy viejo y muy desarrollado en los tres
libros, prácticamente de eso se trata.
¡Qué conflicto! Enamorarse de un amigo/a. Estás al límite,
no sabes si cruzar la barrera que los separa.
Algunos creen que van a arruinar su amistad (Como Ester)
pero lo cierto es que no. No dejan de ser amigos en ningún momento. Una pareja
de novios, que antes fueron amigos, se pueden llegar a comprender
mucho mejor que otras parejas.
Se conocen más tiempo, hay más confianza y comprensión e incluso
hasta se llegan a querer mucho más. No hay nada que arriesgar, y si piensas que
sí. Pues… ¡El que no arriesga, no gana!
Y me estoy desviando del tema…
Ester y Bruno:
Todo indicaba que al final de “No sonrías que me enamoro” Bruno
y Ester serían novios, pero no fue así. Incluso al principio del libro se da a
entender que lo son:
“La sonrisa de Bruno coincide con la de Ester. Por poco tiempo.
Cuando están en el grupo les cuesta mirarse a los ojos. Llevan varias semanas
compartiendo un secreto.” – Capítulo 01
Pensé que al igual que Raúl y Valeria en “¡Buenos días,
princesa!” mantenían una relación en secreto.
Ester se sinceró con ella misma y con Bruno. Le reveló sus
sentimientos, pero al poco tiempo se arrepintió. Alba influyó mucho en su
decisión.
Quedando Bruno solo y confundido, intentando olvidar a Ester,
empezó una relación con Alba, de quién era obvio que no estaba enamorado.
Por su parte Ester, empezó a sentir atracción por Felix
Nájera. -De esta relación nunca estuve muy convencido.-
Felix era demasiado nerd y si tenía una relación con Ester
iba a ser más por molestar a Bruno que por amor.
Al final, Ester deja se sentir atracción por él, cuando se
entera que es quien envía los mensajes
amenazadores a su amigo.
Bruno sabe perfectamente que no está enamorado de Alba,
quien decide cortar con él por la misma razón.
Ahora sí, todo indicaba que estos iban a ser novios pero en
el epilogo no queda muy claro si Bruno y Ester finalmente son novios o no. Tal
vez lo sepamos en “Tengo un Secreto: El diario de Meri”.
Raúl, Valeria y César:
Nuevamente este triángulos amoroso.
Valeria está enamorada de Raúl, de eso todos estamos
seguros, fue su amor platónico durante años. Pero ahora la situación está
complicada.
La delgada línea entre estar enamorado y sentirse atraída
por alguien. Otro conflicto muy común entre los adolescentes.
- “Nunca de ama a una persona como cuando uno es joven. Sin embargo,
los adolescentes de hoy en día son inestables e incapaces de mantener una
relación duradera. Son exagerados, sufridos e indecisos. Cambian más de pareja
que de calcetines. A un chico o a una chica adolescente no ha dejado de
gustarle alguien, cuando ya se ha
enamorado del siguiente. Una gran parte está con su novia o novio pensando en
otro o en otra que cree que le gusta más, mientras planea cómo escapar de su
actual relación.” – Capitulo
20.
Tal vez este no sea el caso de Valeria pero es verídico lo
que se afirma al principio de este capítulo.
Me gustó como Valeria hace un balance entre César y Raúl.
Me pareció muy ingenioso la manera en la cual utilizó una balanza de juguete y las frutas de plástico.
También me gustó la parte en la cual nos dejan a todos en
suspenso, preguntándonos en donde cayó la última fruta.
La llamada que recibió Valeria hizo decidir hacia qué lado
de la balanza posar la fruta. Pensaba que se trataba del lado de César y no
estuve muy convencido de la decisión tomada, pero también cabía la posibilidad
de que la fruta haya caído del lado de Raúl. Finalmente ya sabemos cómo terminó
este triángulo amoroso y con quién se quedó nuestra querida Valeria.
Meri y Paloma:
No tengo mucho que decir.
Ambas son chicas muy jóvenes para ponerse en contra de sus
padres. Por un lado están Esperanza y Ernesto que representan a los padres “Open mind”, comprensibles y por otro
lado, Nieves y Basilio los padres estrictos, conservadores que no aceptan la
opción sexual de su hija.
Es muy común este tipo de historias entre los homosexuales,
predomina mucho el miedo a lo que piensen los demás.
La historia de Meri y Paloma no es más que una de las
millones de historias que hay en el mundo de padres que no aceptan a sus hijos
por su opción sexual, de chicos que sufren de buylling en las escuelas por el
mismo tema y sobre todo de los condicionamientos que nos impone la sociedad día a
día.
Felix Nájera:
Este nuevo personaje, no me cayó muy simpático que digamos,
pero es pieza clave en la historia de Ester y Bruno.
Obsesionado al estudio y a sacar siempre sobresalientes, Félix
Nájera odia a Bruno Corradini con el alma. Es él quien está detrás de todos los
anónimos amenazadores.
En el prólogo no hubiera imaginado que se tratase de él. Ni
siquiera se conocía al personaje.
Elizabeth y Rodrigo eran mis dos y únicos
sospechosos.
Ester empezaba a sentir algo por él hasta que descubrió que
él estaba tras los anónimos. Algo totalmente impresionando por qué como dijo la
misma Ester:
“No creo que un chico como él que se pasa la vida estudiando,
pierda el tiempo en hacer ese tipo de tonterías sólo por una partida de ajedrez
de hace mil años.” – Capitulo 40.
Según Ester, Félix es egocéntrico y según él, se odia. Es por
eso intenta ser siempre el mejor.
Podemos encontrar una pequeña relación entre Rodrigo y Félix:
Ambos están obsesionados con algo.
Wendy Minesota:
Este es un personaje que personifica a todos aquellos
adolescentes pesimistas inseguros de sí mismos.
Wendy Smith, la chica a la que nadie comprende, a la que
todo le sale mal, es finalista en un festival de cortos. Ni ella misma se lo
cree.
Su vida está llena de fracasos, y de malos días, no cree
en ella misma. Es finalista pero seguro pierde por qué según ella nunca le
pasan cosas buenas.
Típica adolescente malhumorada que padece de baja autoestima.
El pesimismo de este personaje se debe –Según yo- a que
siempre estuvo acostumbrada a días malos y difíciles. La gente como Wendy le
teme a los días buenos, porqué cuando se está acostumbrado a que todo salga
mal, tienes miedo a que algo te salga bien. Evitan alegrarse por algo y piensan
siempre en lo peor, por miedo a la ilusión y la post decepción.
Raúl siente lástima por aquella muchacha a la que nunca nada
le sale bien, y no se le ocurre mejor manera de ayudarla que renunciando al
premio, pasando a ser automáticamente Wendy la ganadora de festival de cortos.
No me gustó la manera en que Raúl intenta ayudar a Wendy. Me
hubiese gustado que las cosas se desarrollen de distinta manera y que Wendy
aprendiera sola a no ser pesimista, a pesar de ser o no la ganadora.
El MOMENTO “WHAT THE FUCK?”
- “-¿Qué?, ¿te la vas a llevar al hotel para beneficiártela
tú? ¿O para contarle que has renunciado al premio para que ella ganara?”
- “Ni las palabras de Alicia ni los gritos de Val para que la
dejen sirven para frenar a la chica. Con el odio desatado, reuniendo todas sus
fuerzas, empuja a su antigua amiga al andén, un minuto antes de que el tren
llegue. Valeria cae de espaldas y se golpea la cabeza con el hierro de la vía.
La joven yace inconsciente, mientras sangra empieza a teñir de rojo la brecha.”
- “Esa no voz no es la de Alicia. Es una voz masculina y
conocida. Eli contempla la figura de Ángel al otro lado de andén. No puede ser…
Él no puede estar ahí.”
¿¡Queeeeé!?
No podía elegir solo un momento. Así que elegí tres momentos
para esta sección.
El primero:
Wendy se entera que Raúl renunció al premio solo para que
ella ganará, noticia que le cae tremendamente mal y aunque su corto en realidad
haya sido el elegido para ganar, esta se siente fatal. Como si hubiese
despertado de un buen sueño de vuelta a
la realidad, esa que tanto odia.
Segundo:
No solo está loca, ahora se ha convertido en una psicópata.
Elizabeth acaba de atentar con la vida de la que por muchos años fue su mejor
amiga. ¿Qué pensaba? ¿Qué desapareciendo Valeria iba a desaparecer también
Alicia? ¡ERROR! Sigue viendo a Alicia. Su existencia depende de ella no de
Valeria. ¡Qué hiciste Elizabeth! ¿Qué prefieres? ¿La prisión o un psiquiátrico?
Tercero:
Ángel tampoco existe, y esto ya se veía venir. Pobre
Elizabeth está completamente mal.
EL FINAL:
Elizabeth, se encuentra en un avión con destino a Houston,
ahí puede estar la solución a su problema.
Ahí conoce a una niña rubia llamada Alicia. ¿Será esta una persona
real? ¿o sigue siendo producto de su imaginación? Incluso tiene muñecas y
curiosamente lleva los nombres de sus antiguas amigas, Valeria y Ester, también
tiene un muñeco que se llama Raúl. Demasiada coincidencia.
Parecía un final cerrado pero todavía quedaron temas
abiertos como el de Paloma y Meri, que es seguro que se desarrollará en “Tengo
un secreto: El diario de Meri.” Y éste que acabo de nombrar, Elizabeth ¿Qué
pasará con ella? No sé si se hablará de ella en el próximo libro, esperemos que
sí, tengo muchas ganas de saber qué pasa con ella y con su problema.